viernes, 22 de febrero de 2013

Carretera 234


Todas las noches la misma historia. Salir de trabajar y volver a horas inhumanas a casa, y todo por un sueldo que se come toda mi hipoteca. Siempre la misma carretera, la 234, no, no es una carretera de una película de miedo, al contrario, destaca  por ser tan tranquila que a veces me da por echarme cabezadas mientras conduzco, no sé, que pasará el día en que esa cabezada sea definitiva. Mientras relato esta historia en mi mente ya he arrancado mi coche, esta vez estoy entretenido, una historia para mis adentros y música clásica como cada noche, es posible  que me duerma,  algo que se incrementa  con que me esté distrayendo y entrando en un estado de ``empanamiento´´  mental  que casi atropello a ese hombre que salía tranquilamente a tirar la basura, suerte que estaba mi hermano a mi lado para avisarme, ah, sí, no os he comentado que lleva un rato comiéndome la cabeza, quién me iba a decir que después de 5 años, iba a estar conduciendo de nuevo junto a mi hermano, debí de haber tomado la salida hacía la autopista del cielo cuando hace diez minutos di la cabezada definitiva…

Jose Sánchez
22 de febrero de 2013

No hay comentarios:

Publicar un comentario