Es difícil sonreír cuando todos tus días son negros. Es
difícil no llorar cuando estás solo. No pueden quererte cuando eres un fantasma
en un reino de vivos. Unos buenos días acompañados de un beso de la palabra
soledad. Cada día mi sol solo alumbra mi ventana cuando la veo pasear a ella a
las 17:15 de cada tarde. Una sonrisa que aparece cada noche en mis sueños. Unos
ojos que dicen quiéreme como yo podría quererte. Unos oídos que solo quieren
oír unos buenos días princesa. Un cuerpo que dice, abrázame y nunca me sueltes.
Pero lo siento luz que ilumina mi vida, no puedo dedicarle una sonrisa a una
persona que no sabe que existo, no puedo querer a unos ojos que nunca han
mirado por mi ventana, no puedo susurrar a unos oídos que nunca han escuchado
mis llantos de dolor. Lo siento princesa, nunca podré levantarme y abrazarte
cuando se lleva 20 años en una cama mirando por una ventana paralizado de
cuello hacía abajo….
12 de diciembre de 2012
Jose Sánchez
No hay comentarios:
Publicar un comentario